El autor recuerda con nostalgia su infancia en Italia, explorando cómo la cocina tradicional, con platos como la polenta, refleja la historia, la cultura y las experiencias personales que marcaron su vida.
Maurizio Bagatin narra la vida y la importancia de las mujeres, destacando sus roles multifacéticos y su resistencia frente a las adversidades. Desde labores cotidianas hasta momentos de celebración, se resalta su influencia en la cultura y la economía local, mostrando cómo superan los desafíos y consolidan sus liderazgos en la sociedad.
El protagonista se ve afectado por la suspensión inesperada del tren de las 23:35, desencadenando un viaje lleno de poesía y reflexiones por Sicilia. A través de los paisajes, la historia y los silencios, el relato abraza la riqueza cultural de la región, desde la emblemática Palermo hasta las islas como Alicudi, tejiendo una narrativa que fusiona lo mágico con la cruda realidad.
En un viaje a través del universo africano, entre memorias de guerra, belleza y violencia, el autor se sumerge en la grandeza y el delirio del continente, dejando sus ojos en un eterno viaje y África arraigada en su ser para siempre.
La ciudad italiana se ha construido también a base de música. La memoria se encuentra y la saluda como si la despedida hubiera sido ayer. Éste es un viaje que invita a moverse.
Póngase a la tarea de emprender un viaje largo en pocas palabras. El autor de esta crónica consigue llevarlo por diferentes escenarios y personajes tan distintos y a la vez entrañable.
Al inicio era una fábula, hombres y mujeres se asentaron al borde del rio y bebieron su agua, sembraron las pocas semillas que habían cosechado en el largo camino, vieron y luego tocaron la tierra fértil, las piedras, el bosque nativo, sus árboles. Era una síntesis del paraíso que luego describió Humboldt, era el clima tan amado por Francisco Viedma.