
El incendio en el Área Protegida Ñembi Guasu entró en su fase más crítica: la liquidación final del fuego. Aunque las llamas visibles fueron controladas gracias al trabajo conjunto de bomberos, guardaparques, voluntarios e instituciones como la Gobernación de Santa Cruz, la Autonomía de Charagua y NATIVA, la etapa de liquidación exige máxima precaución. Equipos especializados trabajan sin pausa para extinguir focos subterráneos y material combustible que podrían reactivar el incendio en horas.
La operación —que incluye monitoreo táctico y sellado de áreas con riesgo de rebrote— se extenderá hasta el fin de semana. Pese a los avances, se mantiene la alerta y la necesidad de apoyo logístico (alimentos, agua y equipos) para los brigadistas, quienes permanecen en territorio. Esta fase, considerada la más dura técnicamente, revela la urgencia de fortalecer protocolos de prevención en un país donde el 70% de los incendios se reactivan por liquidaciones incompletas.
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