La Fundación Amigos de la Naturaleza presenta la XII edición del Festival Internacional de Cine Verde, Biodiversidad & Medio Ambiente en Acción (FICV), un evento que, a través del poder del cine, busca concienciar a la población sobre los problemas ambientales que enfrenta Bolivia y el mundo. Del 12 al 15 de noviembre, en el Museo de la Ciudad Altillo Beni, de Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), las proyecciones iniciarán a las 19:00 horas, invitando a los asistentes a reflexionar y tomar acción en favor del medio ambiente.
Conversamos con Karina Sauma, directora de Comunicación de la FAN, organizadora del festival, quien nos comparte cómo, tras 12 años de trayectoria, el FICV ha evolucionado y ha impactado en la conciencia ambiental del público. Nos habla sobre la importancia de conocer para conservar, la apuesta por la producción nacional y cómo el cine se ha convertido en una herramienta poderosa para transmitir mensajes de esperanza y movilizar a la sociedad hacia un cambio positivo.
En esta entrevista, Karina nos adelanta lo que hace especial a esta nueva versión del festival, el perfil de los cineastas participantes y cómo el arte puede inspirar a las personas a involucrarse activamente en la protección de nuestro patrimonio natural. Una invitación a sumergirse en cuatro días de cine y reflexión ambiental que prometen ser una experiencia transformadora y donde se proyectará el día de la inauguración (12 de noviembre), el documental producido por Revista Nómadas y Fundación Tierra: El desolador impacto de la deforestación en Santa Cruz (Bolivia).
– Karina, después de 12 años de organizar el Festival Internacional de Cine Verde, ¿cómo sientes que ha evolucionado la conciencia ambiental del público a lo largo de las ediciones?
– A lo largo de estos años creemos que nuestro aporte ha sido de gran valor; hemos generado el mensaje de “conocer para conservar” bajo la consigna que si no conocemos lo que tenemos es muy difícil pensar en su conservación. Es así que, en los últimos años, podría decirse unos 6 años atrás, venimos apostando por la producción nacional con esa mirada de que la gente, el ciudadano de a pie, pueda ver la situación real de los problemas/amenazas/beneficios/respuesta de nuestro patrimonio natural.
– ¿Cuál ha sido el impacto más significativo que el festival ha logrado en términos de sensibilización ambiental y protección de la naturaleza?
– Hemos logrado sembrar en cada espectador el interés por el cuidado de nuestro patrimonio natural. Cada función es un llamado a la acción para generar ese cambio de actitud frente a la situación ambiental que vive nuestro país y el planeta. Necesitamos hacer las paces con la naturaleza, no podemos seguir atacándola y lastimándola como lo está haciendo el ser humano. Vemos que estos espacios como el Festival de Cine Verde generan un pedacito de esperanza en quienes se acercan a las funciones y viven cada noche. Estamos seguros que esa persona lleva al hogar, a su entorno laboral, de amigos, conocidos algo del mensaje que deja cada proyección.
“Hemos generado el mensaje de ‘conocer para conservar’ bajo la consigna que si no conocemos lo que tenemos es muy difícil pensar en su conservación.”
¿Qué hace especial esta decimosegunda versión del FICV? ¿Hay alguna temática o enfoque particular que sea protagonista este año?
– Este año ha sido una gran sorpresa: producción nacional a toda máquina. Nos sentimos muy felices el día que revisamos el material enviado y vimos que gran parte era producción nacional, realmente nos llena de orgullo ser nosotros quienes podamos presentar todo este gran trabajo de productores, directores, cineastas, etc. Es un honor y admiración muy grande la que tenemos por quienes desarrollan este trabajo enfocado en mostrar la realidad socioambiental de nuestro país.
También es importante mencionar la producción internacional y este año, si bien no estamos con una temática cerrada, el tema agua es muy importante. Otro tema que hace años viene marcando heridas muy fuertes es la deforestación y que a través de las pantallas y de productoras independientes se muestran la humanización de los datos.
– El cine tiene un poder visual y emocional muy fuerte. ¿Podrías contarnos alguna historia detrás de una película o documental que haya impactado profundamente a los asistentes en ediciones pasadas?
– Una de las películas que dejó una huella profunda fue UTAMA el año 2022, que mientras en la película veías una sequía extrema, la noche que la proyectamos llovía torrencialmente. Ese día estábamos al aire libre en la Manzana Uno. Esas fuertes imágenes de UTAMA frente a la naturaleza viva, a través de imágenes poderosas y testimonios conmovedores, los asistentes fueron llevados a una reflexión profunda sobre la importancia de preservar nuestros ecosistemas. Al final de la proyección, muchos compartieron sus emociones respecto a la importancia y compromiso de cuidar y proteger nuestros bosques.
– ¿Cómo ves el rol de los festivales de cine verde en la lucha contra el cambio climático y la conservación de la biodiversidad? ¿Crees que el arte puede inspirar a tomar acción?
– Los festivales de cine verde juegan un papel crucial en la educación ambiental, ya que tienen la capacidad de conectar a las personas con temas complejos de una manera accesible y visualmente atractiva. A través del arte, es posible transformar datos, información técnica y cifras en historias humanas, haciendo que el mensaje sea más cercano y movilizador. Creo firmemente que el arte puede ser un catalizador para la acción, despertando en el espectador el deseo de ser parte del cambio y de proteger nuestro patrimonio natural.
“Cada función es un llamado a la acción para generar ese cambio de actitud frente a la situación ambiental que vive nuestro país y el planeta.”
– ¿Cuál es el perfil de los cineastas que participan en el FICV? ¿Cómo seleccionan las películas y documentales y qué buscan transmitir con ellas?
– Tienes Directoras como Leire Egaña de la Ruta de los Conquistadores que presentamos el último día, periodistas como Eduardo Franco, Roberto Navia, con mucha experiencia en la construcción de reportajes y periodismo de investigación; Manuel Seoane, un fotógrafo documentalista boliviano con mucha experiencia, Yesenia Novoa, documentalista mexicana, en fin, la lista es larga pero una característica común entre todos: son apasionados por el medio ambiente y comprometidos de transmitir lo que sucede a través del arte. Muchos de ellos provienen de diferentes partes del mundo y traen consigo perspectivas diversas sobre los desafíos ambientales.
La selección de películas se enfoca en aquellas que logran transmitir mensajes de esperanza, conciencia y acción, abordando temas urgentes desde la deforestación hasta el cambio climático. Buscamos obras que provoquen reflexiones profundas y motiven al público a replantearse su relación con el entorno.
Esta lista de personajes amantes de la naturaleza aumenta cada año; podemos decir que somos privilegiados de haber contado con producciones cinematográficas de directores como Ethan Steinman, Michael Orino Scott, Austin Haeberle, Cosima Dannoritzer, Octavio Juliano, Candida Brady, Jan Van Der Berg que siempre nos apoya con producciones cinematográficas, Franny Armstrong, Alejandro, Marcos y Santiago Loayza, Leila Conners Petersen y Nadia Conners, Marcelo Viñas, Yann Arthus-Bertrand, Emanuel Vaughan-Lee, Fredrik Gertten, Fisher Stevens con la participación de Leonardo DiCaprio, Jean-Michel Cousteau entre otros.
– ¿Qué les dirías para que asistan y se enamoren de esta experiencia única? ¿Qué puede esperar el público de estos cuatro días de cine y reflexión ambiental?
– EL FICV es una oportunidad única de ver el mundo desde otras miradas, de vivir una experiencia transformadora que va más allá del entretenimiento. Durante estos cuatro días (12, 13, 14 y 15 de noviembre), el público podrá disfrutar de proyecciones conmovedoras, producción nacional e internacional de alto nivel y de conectarse con personas que comparten el amor y respeto por la naturaleza. Más que un festival, sentimos que somos una comunidad de individuos que buscamos un futuro más sostenible y en armonía con nuestro planeta. El FICV no tiene costo, solo tienes que llegar temprano para encontrar espacio y apreciar lo bueno del cine socioambiental.
“Es un honor y admiración muy grande la que tenemos por quienes desarrollan este trabajo enfocado en mostrar la realidad socioambiental de nuestro país.”
¿Qué mensaje final quieres dejar a quienes asistirán este año? ¿Qué esperas que se lleven consigo después de vivir el festival?
Mi mensaje final sería que el FICV es un espacio para reflexionar, aprender y, sobre todo, para actuar. Espero que cada asistente se lleve consigo una nueva perspectiva, un compromiso renovado o incluso una inspiración para involucrarse en proyectos ambientales. Quiero que salgan del festival sintiendo que, aunque los desafíos son grandes, cada uno de nosotros tiene un papel vital en la protección y conservación de la biodiversidad y en la lucha por conservar nuestro patrimonio natural.
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Puedes conocer la cartelera del FICV en el siguiente enlace: https://www.fan-bo.org/wp-content/uploads/2024/11/FICV_Cartelera2024_11.11.2024.pdf
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Autores
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Roberto Navia
Desde hace más de dos décadas transita por el mundo para intentar elevar a los anónimos del planeta al foco de lo visible. Sus crónicas emblemáticas: Tribus de la inquisición y Los Colmillos de la Mafia le han permitido ganar dos veces el Premio Rey de España (2014 y 2017); Esclavos Made in Bolivia, el premio Ortega y Gasset (2007); el documental Tribus de la Inquisición, la nominación a los Premios Goya (2018), Flechas contra el Asfalto y Los Piratas de la Madera desangran el Amboró, dos veces ganadores del Premio de Conservación Internacional, entre otros galardones nacionales e internacionales. Es docente universitario de postgrado, la cabeza de la Secretaría de Libertad de Expresión de la Asociación de Periodistas de Santa Cruz, miembro del Tribunal de Ética de la Asociación Nacional de la Prensa de Bolivia y de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).