Una gran muralla de bosque para proteger al Pilcomayo

Especiales

En las riberas del río Pilcomayo (Tarija, Bolivia), comunidades indígenas, productores y defensores e instituciones ambientales impulsan la creación de un corredor ecológico. Buscan frenar la deforestación y preservar un ecosistema vital antes de que sea demasiado tarde.

29 junio, 2025

Roberto Navia
Periodista de investigación
Karina Segovia
Fotógrafa de dron
Erico Segovia
Fotógrafo

En el Chaco tarijeño, donde el viento caliente lleva el mensaje de un río que aún respira, el Pilcomayo resiste. Entre varios tentáculos amenazantes, nace una esperanza: la de un corredor ecológico que abrace sus márgenes como escudo de vida. Este reportaje especial de Revista Nómadas eleva las voces que no se rinden —líderes indígenas, apicultores, biólogas, ganaderos y científicos— que, desde distintos rincones del territorio, claman por proteger lo que aún late. Historias vivas, tejidas por el río y por quienes lo aman, se cruzan con imágenes que revelan su alma indómita: un Pilcomayo que exige pide acción urgente.

El Corredor Pilcomayo: la última esperanza contra el exterminio del río que calma el hambre y la sed del Gran Chaco

Organizaciones, comunidades y científicos trabajan contra reloj para exigir la aprobación del Corredor del Pilcomayo, última esperanza para salvar el río amenazado por deforestación, contaminación y cambio climático.

Seis defensores del río Pilcomayo revelan por qué proteger su vegetación y todo lo que vive en ella, es una urgencia vital. Desde distintos roles, alzan una sola voz por un corredor ecológico que urge ser aprobado. Son las voces del Pilcomayo: guardianes de un río en peligro.

“El corredor ecológico Pilcomayo es una medida salvavidas no solo para el río, sino para todo el Chaco”

La bióloga Ludmila Pizarro es una de las líderes que impulsa la creación de un corredor ecológico para salvar al río Pilcomayo, última fuente de agua permanente en el Chaco y refugio vital para pueblos indígenas y fauna silvestre.

“El río es sagrado, es vida. Si atentamos contra el Pilcomayo, es como atacar a un padre o a una madre”

Pablo Rivero Fernández, Capitán Grande del pueblo weenhayek, defiende la cosmovisión indígena y la urgencia de proteger el río Pilcomayo, fuente de vida para las comunidades del Chaco.

“Necesitamos preservar el monte chaqueño no solo por la miel, sino por todo lo que sostiene: alimento, economía, cultura, clima”

Guido Saldías, apicultor y especialista en apicultura, revela cómo el Chaco boliviano produce una miel premiada mundialmente, mientras advierte sobre la urgencia de proteger este ecosistema amenazado por la agricultura intensiva y la deforestación.

“Aquí, el forraje nace del monte, y el agua viene del río Pilcomayo: desmontar es destruirnos”

Ganadero chaqueño y presidente de la filial 12 de Agosto en Villamontes, Abdón Sánchez Ruiz defiende una ganadería que convive con el bosque, se alimenta de frutos silvestres y depende del río Pilcomayo para sobrevivir. Él heredó la ganadería de sus abuelos, pero su mayor aprendizaje vino del propio monte: entendió que desmontar no era progreso, sino amenaza directa para la vida.

“Si los menonitas compran esas tierras, van a arrasar con las palmas y con nuestra artesanía”

Marcelo Villafuerte Mitre, artesano weenhayek, alerta sobre el riesgo de perder la palma que da vida a su cultura artesanal si los ganaderos continúan vendiendo tierras a colonias menonitas.

“Me decían: ‘¿Turismo aquí? ¡Si hay tantos mosquitos!’ Pero la gente viene… y hoy todos creen en este futuro”

Tomás Rivero, emprendedor turístico cerca de la ribera del río Pilcomayo, revela cómo la reconversión hacia el turismo responsable está salvando el río, mientras alerta sobre las amenazas de la agricultura intensiva y la sedimentación que afectan a los peces y al ecosistema.

Pilcomayo indómito: el río que respira vida

En el río Pilcomayo, las redes vuelan como alas de esperanza mientras los pescadores weenhayek resisten entre brisas, aves y árboles caídos. Este fotorreportaje captura la belleza, la lucha y la fragilidad de un río que se niega a morir. Un viaje visual por su belleza indomable y por la vida que depende de su cauce y del bosque que aún está en sus riberas.

Autores

Roberto Navia
Desde hace más de dos décadas transita por el mundo para intentar elevar a los anónimos del planeta al foco de lo visible. Sus crónicas emblemáticas: Tribus de la inquisición y Los Colmillos de la Mafia le han permitido ganar dos veces el Premio Rey de España (2014 y 2017); Esclavos Made in Bolivia, el premio Ortega y Gasset (2007); el documental Tribus de la Inquisición, la nominación a los Premios Goya (2018), Flechas contra el Asfalto y Los Piratas de la Madera desangran el Amboró, dos veces ganadores del Premio de Conservación Internacional, entre otros galardones nacionales e internacionales. Es docente universitario de postgrado, la cabeza de la Secretaría de Libertad de Expresión de la Asociación de Periodistas de Santa Cruz, miembro del Tribunal de Ética de la Asociación Nacional de la Prensa de Bolivia y de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
Karina Segovia
Erico Segovia

Te puede interesar

Secciones

Una gran muralla de bosque para proteger al Pilcomayo

Reportaje

Entrevistas

Fotorreportaje

Autores

Siguenos en redes sociales

Secciones

¡No Te Pierdas Nada!